Si comenzamos por el domingo, les puedo decir que inició muy tempranito, cuando me puse a jugar Metal Gear Solid: 4. Guns of the Patriots.
Soy gamer de corazón, eso cualquiera lo sabe. Amo jugar en cualquier consola, me encantan los shooters, los RPG, los juegos de acción de plataforma, de carreras... vaya, he jugado hasta FIFA realmente divertido aunque no me gusten en verdad. Pero en fin... Con los juegos tuve que terminar haciendo lo mismo que con las series de televisión y las películas. Es decir, cada año digo cuáles me gustan más que cuales, cuáles han reventado las expectativas... Cuáles son mis favoritas en ese momento y así... Pero siempre siempre, habrá algo que es insuperable de cualquier manera. En las series de televisión es Rome y The Sopranos, en las películas es Pulp Fiction y The Return of the King. Y en los videojuegos, es MGS:4. No encuentro y probablemente nunca encontraré algo mejor hecho que ese juego. Todo está pensado, las gráficas son impresionantes incluso para el día de hoy, casi 4 años después de su lanzamiento. Amo Metal Gear, lo amé cuando lo terminé la primera vez y lo amo hoy que ya estoy por fin jugándolo en mi casa, en mi consola, en mi tele, en mi silla. Si, ese fue mi domingo.
El domingo terminó de manera común, yo durmiéndome temprano para despertar temprano y eso... jugué un rato Call of Duty con Leo pero de ahí en fuera, nada fuera de lo normal.
Esta va a ser una semana corta, hoy es la cena de fin de año de The Holy Crown, la esperaba con ansias desde Septiembre cuando se aprobó el plan semestral. Vamos a ir a comer un Bufete. Pero me estoy adelantando.
El lunes me fui a trabajar a horario normal, no hice nada raro, fui, vine, hice y demás. El trabajo fue ligero de hecho, pero nos tocó a una amiga y a mi, en una fila llena de asnos degenerados. Estaba el que no se calla y no deja de hacer comentarios estúpidos. El que no deja de reirse. La típica mujer que se junta con el que se quiere hacer el malo. Y por supuesto, el que se quiere hacer el malo y su bola de compinches. Este hombrecillo, que se quiere sentir malo, es un idiota más o menos de mi edad. Al parecer, por lo que he visto, estudia medicina, porque a veces sale del trabajo con la bata puesta y una vez lo vi sacando el estetoscopio. Por eso me empezó a caer mal. Me parece en absoluto pretencioso el hecho de que siempre, todas las noches, sin falta (exceptuando ahora en vacaciones), salga con la bata de médico puesta. ¿Qué pretendes demostrar? ¿Que eres muy chingón y que puedes estudiar medicina al mismo tiempo que trabajas? Déjame decirte algo, inepto, hay mujeres ahí, y hombres también, que mantienen a familias enteras, con el sueldo de miseria que se nos paga. Tal vez para ti no sea mísero porque con él, compras el alcohol de los fines de semana y tus prácticas de laboratorio, pero para personas que tienen que darle de comer a otras personas, te reto a que lo intentes tal solo por una quincena. El caso es que el animal este del que estoy hablando, me di cuenta que a medio día saca el iPod y se pone a jugar como si nada, mientras está en llamada, mientras hace las encuestas... qué carajo con la generación actual. ¿Por qué todos salimos tan jodidos? A veces el inútil se desconecta del sistema y se queda sentado en la silla, a veces se hace el dormido, mientras entran y entran llamadas. ¿Dormido? Sabemos bien que te estás haciendo pendejo. Y luego, lo escuché en la peor presentación de la estupidez: dijo que le iba a decir a la jefa que su "hija" (que no tiene) tenía fiebre y tenía que ir a cuidarla. Maldito animal...
El martes, ayer, todo transcurrió de manera normal. Aunque falto una de mis amigas, me la pasé bien porque las encuestas estaban entrando poco a poco y no me sentía bajo presión como otras veces. El problema vino cuando empezaron a dolerme mis pompitas porque esas malditas sillas de porquería ya no tienen nada de cojín... pero bueno, no se puede tener todo en la vida.
Si cuenta hablar de hoy, puedo decirles que me levanté 2 horas más tarde de lo normal, hoy no voy a ir a trabajar, jugé CoD un buen rato, luego chequé correos, desayuné, esas cosas, luego jugué un rato de Skyrim y ahora escribo en el blog. Esa ha sido mi semana hasta ahora.
Publicado originalmente en Puerto al Olvido. Sujeto a las licencias de The Holy Crown Foundation.
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