15 ene 2011

Diario de Max en el fin del mundo de Diciembre 2010


Parece que Many ha decidido que no va a dejarnos sin saber qué pasa con Max y el fin del mundo. Aunque yo no  doy nada por sentado, y menos en este blog; puedo decirles que confío en que no nos quedaremos sin saber la verdad. 


-Max en el fin del mundo-

Diario de Max (algún día) de Diciembre de 2010
(Capítulo 6.4)

Para Many la vida es un gran baile. Me lo dice constantemente mientras me enseña sus extraños pasos de baile-combate.

Ramón, Gabs, Polet y Yola tocan sus instrumentos, Hacen una versión hermosa de “El baile y el Salón” de Café Tacuba. Para ellos esto es una fiesta. Para mí es un reto personal. No puedes destruir Zombis con música, menos con baile. Pero si se trata de un arte de defensa personal ¡venga!

Así pensaba cuando entré al dojo. Many meditaba como acostumbra, seguramente no recordaba que teníamos planeada una pelea para el día de hoy.

Así que entré haciendo un fuerte ruido, mis nervios exigían a mis pulmones mayor oxigeno y éstos a mi nariz una respiración agitada. Pero Many estaba ahí, calmado y confiado.

Se levantó, los músicos notaron aquello pues aumentaron el volumen. Y Many comenzó a moverse con gracia y simplicidad.

Contuve el aliento durante la mitad de un segundo, exhale y comencé mis propios pasos de baile. Esto es una batalla.

Apreté los dientes, gire mis manos por encima de mi cabeza y sentía vibrar mis músculos al sonido de la guitarra de Gabs y el bajo de Ramón, agitaba mis manos con fuerza, mis píes iban de adelante a atrás y mis hombros marcaban el tambor de Polet.

Llegado el momento de la voz de Yola comencé a acercarme a Many. Me acerqué con los brazos defendiendo el rostro, mis pies aún llevaban el ritmo de la canción dando giros sobre mi eje.

Many sólo disfrutaba la canción. Imprudente o provocadoramente me daba la espalda a propósito. Así que lancé una patada alta, pero Many paso por debajo del arco de la rodilla, giró su cuerpo para darme el frente pero antes de pasarme por completo se levantó, haciendo que su hombro empujara mi pierna aun mas alto y arrojándome contra el suelo en un golpe estruendoso que marcó el fin de la canción.

Detesto perder. Debo entrenar más y ser mejor, detesto perder.

Y Many tan tranquilo, para él no hay problema porque claro es fácil ser el mejor, pero ojalá no me subestimara tanto, ojalá me tomara en serio y no se burlara de mi baile.



Publicado originalmente en Puerto al Olvido. Sujeto a las licencias de The Holy Crown Foundation. ESTO NO ES UNA NOTA DE FACEBOOK.

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